Museo de Arte Funerario 'Benigno Montoya' tesoro de Durango
Museo de Arte Funerario 'Benigno Montoya' conserva más de 700 piezas de arte.
DURANGO, Durango.- El Panteón de Oriente de la capital de Durango es el cementerio más extenso en el estado, además de su hectáreas y antigüedad, este camposanto destaca por su relevancia histórica, cultural y artística, pues ahí se encuentra el Museo de Arte Funerario “Benigno Montoya” que fue fundado en el año 2002 bajo la gestión de la maestra Elia María Morelos Favela y la historiadora María del Pilar Alanís Quiñones.
El museo recibe el nombre de Benigno Montoya en honor al maestro cantero zacatecano, pero que durante toda su vida radicó en la ciudad de Durango, quien en vida y después de su muertes destacó por su legado artístico gracias al talento que desarrollo en el manejo del cincel y martillo al moldear la cantera.
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¿Cuántos monumentos hay en el Museo de arte fúnebre Benigno Montoya?
Actualmente el museo de Arte Funerario cuenta con un inventario que asciende a más de 700 monumentos funerarios catalogados entre piezas artísticas e históricas. en su estética se aprecian diferentes elementos arquitectónicos influenciados por el romanticismo europeo del siglo XIX.
Destacan figuras de arquitectura y esculturas de ángeles, ánimas e imágenes religiosas elaboradas principalmente en cantera blanca; algunas de estas piezas han tenido un deterioro natural por el paso del tiempo o provocado por vandalismo, aunque se ha procurado reforzar la seguridad en el recinto para preservar su imagen. El mantenimiento de estas piezas esta a cargo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
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¿Quién fue Benigno Montoya?
Su biografía digital compartida en la página oficial del Museo narra que el maestro Benigno Montoya, cuyas obras son representativas del museo funerario con que cuenta Durango, fue un talentoso artista nacido el 13 de febrero de 1865 en Zacatecas, sin embargo, fue duranguense de corazón y por adopción, ya que desde muy temprana edad se encontró en Durango trabajando en Mapimí en la iglesia de Santiago Apóstol.
Junto a su padre Jesús Montoya y su tío Matías Montoya, aprendió el oficio de cantero, debido a la necesidad de dejar los estudios de primeras letras para ayudar económicamente a su familia.
Paulatinamente Benigno desarrolló un talento inigualable para ejecutar el desbaste y labrado de la piedra en cantera, que con el paso de los años le ganó el encargo de trabajos y obra en templos y capillas; sus primeros trabajos en la ciudad de Durango fueron realizados bajo el encargo del segundo arzobispo de Durango, D. Santiago Zubiría y Manzanera, proyectando los acabados del edificio arzobispal y la capilla neogótica.
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¿Cómo se especializó en arte fúnebre Benigno Montoya?
En rubro funerario, trabajó capillas que fueron diseñadas morfológicamente de acuerdo al orden ecléctico, con gran parcialidad al estilo neogótico; también desarrolló cruces de tronco ornamentadas con palomas y decoración Fito morfa, cuya lectura era apreciable por las sociedades románticas por su discurso floral; de igual forma, proyectó por excelencia imágenes religiosas, cristos, ánimas y ángeles, entre los que se distinguen ángeles pasionarios, ángeles niños, ángeles sobre pórticos y ángeles apocalípticos, entre otros.
Montoya falleció el 25 de diciembre de 1929, dejando alumnos que siguieron su carrera y un basto acervo que es reconocido en escala internacional.