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Recolecta botellas para mantener a su familia

Francisca es una mujer adulta mayor que recolecta botellas de plástico a lo largo de las calles de la ciudad de Durango, acompañada de su hija y de su yerno, obteniendo menos de mil pesos a la semana.

Por: Jesús Carrillo

DURANGO, Durango.- La vida para muchas personas no es nada fácil, existen hombres y mujeres en todo el mundo que se les complica más que a otros salir adelante, pero, eso no les impide trabajar de sol a sol para llevar algo de comer a su mesa, tal es el caso de Doña Francisca.

Para Francisca levantarse desde muy temprano para poder trabajar en la recolección de botes plásticos es una tarea diaria y maratónica, la cual comparte con su esposo, hija y su yerno.

Apenas pasó los 60 años, y los estragos en su piel por la exposición a altas jornadas de trabajo, por el sol ardiente de Durango, y ahora en esta temporada a las bajas temperaturas, ha dejado huellas palpables en su rostro, una mirada cansada pero con un brillo que la caracteriza .

Día tras día recolecta tan sólo 30 kilos de botellas reciclables, las cuales lleva casi de extremo extremo, hasta el basurero, para poderla vender el kilo en tan sólo seis pesos, 180 en total es lo que se lleva los días que pasa la basura, los cuales junto con lo poco que su familia alcanza recolectar, no llega ni a mil pesos por semana, dinero que no alcanza para mantener a cuatro personas, una casa, y los gastos de esta.

Lleva años dedicándose a esta labor, antes lo realizaba en el mismo basurero, pero desde que empezaron a solicitar unas credenciales para poder ir a pepenar en este relleno sanitario, doña Francisca ya no pudo acudir, por lo que entre dos a tres veces por semana recorre varias calles de Durango para esculcar la basura y recolectar los desechos que a ella le sirven para venderlos y poder sacar a su familia adelante.

Aunque sea un trabajo honesto y que ella reconoce que le gusta, también está consciente que es lo que le toca, ya que a su edad no le darían trabajo, por lo que su sacrificio es enorme pero sus ganas lo son más.